Hola a todos. Acabo de publicar mi tercera novela y después de contratar los servicios de una correctora profesional, revisar las galeradas y compartir el manuscrito con media docena de personas que también revisaron los textos acabo de descubrir al menos tres fallos. No son demasiado importantes, una letra que falta en una palabra, una preposición que sobra y una coma que falta.
Aún así estoy envenenada ¿cómo es posible? Leí al menos diez veces la novela después de las correcciones buscando fallos. Me pasaron desapercibidos.
Los corregiré y volveré a subir la novela (Amazon).
Pero las novelas vendidas ya no tienen solución.
Las dos primeras las autopubliqué con editorial y también tienen fallos. Pensé que podría subsanar ese problema. ¿Cómo lo hacéis?
Un gusto saludarte Ana.
Es un arduo trabajo de nunca acabar. Somos humanos y cuando estamos inmersos en las historias nuestro cerebro llena los vacíos.
Puedes acercarte a la correctora con los fallos, no tanto a reclamo, pero sí para que le hagas saber cómo te hace sentir que haya pasado por alto estos puntos. Recuerda que todos cometemos errores.
Algo que yo hago es releer, pero solo después de un tiempo. Hacerlo no con ganas de corregir, sino de olvidar un poco de que trataba la historia. Con calma, con mente abierta.
Lo otro lo da la experiencia. ¿Tercer libro y quieres que todo salga perfecto? Te entiendo. Incluso los grandes escritores cometen estos fallos. No te sientas mal. Pero después de miles de personas leyendo, hablando de estas cosas, eso se va corrigiendo. (Por eso a veces ves libros con segunda, tercera, cuarta edición. Te recomiendo eso)
Escribir es un arte. Hagas lo que hagas, no dejes de escribir.
Gracias. Me reconfortan tus palabras. Espero que los lectores sean tan comprensivos y no me lo tengan en cuenta. En cualquier caso, seguiré trabajando en ello. Es una pena que todo lo que disfruto escribiendo se vea empañado con los berrinches que cojo con todo el proceso de publicación. Gracias otra vez.
Hola, Ana <3
Suscribo todo lo que te ha dicho Ohm.
Yo creo que cuando un narrador se acerca a la perfección no hablamos de “forma”. La perfección en la forma en un texto corre a cargo de un corrector que marque los detalles, por eso se contrata ese servicio. Estoy segura de que tus lectores están encantados de leerte y la mayoría de ellos ni se ha dado cuenta de esos tres fallos que ahora para ti son como tres soles.
En mi caso, si te sirve de consuelo, siempre me cazo en nuevos errores cuando me releo, incluso aunque la puntuación, gramática, ortografía estén correctas. Errores de estilo. Cacofonías que rompen la música del texto, repeticiones, algún palabro o locución que me invento y para mí ha sido real toda mi vida xD. Las pocas veces que he trabajado con corrector profesional me ha preguntado de dónde soy . Pues eso, humanos somos. Los correctores no lo son son unos makinotes con ojos de halcón en todas partes.
No te lleves un mal rato por esas tres cositas que no le quitan valor a tu trabajo.
Un abrazo.
Hola. Una fase de la revisión puede ser la lectura en voz alta. Pero, como ha dicho alguien, el cerebro tiende a rellenar huecos de forma inconsciente. Por eso, prefiero oír el texto leido por una aplicación de lectura. Esto ayuda mucho a detectar los casos en que falta una letra y/o se ha tecleado mal.
Gracias por vuestros ánimos y consejos. Tendré que poner en práctica nuevos métodos, sin duda.
Hola, Ana. Si te sirve de consuelo, tras publicar mi libro, el cual había revisado hasta la saciedad, me di cuenta de que había una errata. Pero no una errata cualquiera… En vez de la palabra “punto” había escrito “puto”, quedando la frase algo así: “dos líneas secantes con un puto en cada uno de los ángulos”.
Por suerte lo pude cambiar rápido, pero más de un lector se echaría una risa, o bien se indignaría. En fin, yo me lo quedo como anécdota.
Me consuela, y mucho, saber que a vosotros también os pasa. Sin embargo, no llego a comprender cómo pudieron pasar inadvertidos ciertos detalles después de mil y una correcciones. Espero corregir los actuales y fijarme más para la próxima. ¡Qué desastre!
Hay que aprender a vivir con la imperfección, si no jamás sueltas un proyecto para abordar otro.
Hola Ana.
En la última novela que he publicado, yo también he detectado algunos errores que ya he subsanado y también me he preguntado lo mismo que tú; porque la he revisado varias veces, incluso la he escuchado en voz alta, que para mí es como más errores se detectan y, sin embargo, esos fallos me han pasado desapercibidos; pero somos humanos y, por tanto, imperfectos.
Y los correctores humanos, sintiéndolo mucho, también lo son.
Yo lo que intento es que estas cosas, siempre que sean errores sin importancia y no que al final de la novela aparezca un personaje al que has matado antes, me afecten cada vez menos.
Ánimo y no dejes de escribir.
En mi primera novela utilicé dos correctores diferentes y aun asi sigo encontrando fallos. Por supuesto, yo la corregí, pero los fallos son inherentes al hecho de escribir. Otra cosa son fallos grandes, pero una “s” que sobra, una coma en mal sitio, etc. son cosas que pasan y seguirán pasando, incluso con IA.
Madre mía!! Tengo tentaciones de revisar de nuevo mis libros anteriores. Esos fueron autoeditados con editorial, si encuentro nuevos fallos me va a costar que los corrijan. Horror!!
jajajajajajajajajaja adoro.
Yo una vez leí “cojón” en vez de “cojín” en un informe de trabajo (“se coloca cojón antiescaras”); no lo había escrito yo, pero perfectamente habría podido pasarme!!