Hace mucho escribía pero lo abandoné. Ahora me atrevo a lanzar unas cuantas palabras. Les comparto algo:
- Paredes grises que no se ocultan tras la pintura,
Sólidas, altivas, carentes de lo que presumen.
Entre ellas una superficie.
Albergan, contenidos, cuerpos en movimiento.
¡No!, carnes y huesos desplazados por la inercia.
Vísceras mecanizadas en descomposición.
- Afuera se han quedado los sueños,
Algunos son leves suspiros,
Existencias ínfimas condenadas al olvido.
Se escuchan ecos de unas risas,
Aplacadas por la robustez de las paredes.
- También hay columnas, agarrotadas.
Parecen juntarse, aunque siguen inmóviles.
Dejan deslizar por sus poros algunas voces,
Mercaderes de ilusiones falsas,
Colonizadoras que cambian
Alegría por seguridad.
- En mi mano tengo un fuego,
Leve, inquieto.
Quiero usarlo.