A mí lo que me preocupa es que es muy subjetivo. La tilde nunca va a ser obligatoria, sino que será opcional únicamente (por no decir solo ) cuando a tu juicio, entrañe ambigüedad. Es decir, puedes no volver a poner la tilde nunca más, si piensas que nunca va a haber ambigüedad porque del contexto se extrae el significado (fue el argumento para suprimirlas) y no puedes, aunque quieras, ponerlas siempre, sino solo en los casos en los que creas que puede haber ambigüedad.
En otras palabras, «sólo» («únicamente») lo escribirás a veces con tilde y a veces sin tilde. Por supuesto «solo» («sin compañía») sigue yendo siempre sin tilde. Para mí es incluso más confuso que antes. Además de que «sólo» puede entrañar ambigüedad, puede que «éste» o «ésta» también, pero «ése» o «ésa» no veo cuándo pueden entrañar ambigüedad, con lo que deberían seguir yendo siempre sin tilde.
No sé si lo veis igual que yo…