Ja, ja, ja. ¡Qué bueno! Me hubiera gustado estar allí para verlo. ¡Tuvo que ser épico!
Sí, la verdad es que se dan situaciones, a veces, complejas. Hace poco tuve que hacer un test y había una frase, precisamente, donde se decía que había un error en el texto. El problema era que tal incorrección no existía, porque la tilde del demostrativo es opcional (era la única errata posible); pero el que redactó la pregunta no debía saberlo… Por eso digo que, cuanto más se simplifique, mejor. Sino, por activa o por pasiva, se generan equívocos.
Cuestión aparte será si, algún día, se les da también por recomendar simplificar cuestiones más complejas ―como las comillas españolas por las inglesas, por ejemplo, que ahí sí que el debate está servido―. Esperemos que no lleguemos a tanto, aunque al paso que va, ya lo estoy viendo venir…