Espacio para que @villarpinto y @elescritorfantasma expongan para el bien de todos, lo mucho y bueno que saben sobre este tema. ¡Gracias a ambos desde ya!.
¡Gracias, @Filmbeat! Dadme un poquillo de tiempo, que de hacerlo, quiero que sea bien y mencionando la mayor parte de herramientas disponibles, que no son pocas, y difieren si se trata de edición por cuenta propia o ajena, como señalaba aquí. Para poner cuatro cosillas y tópicas, pues… como que no le veo sentido. Cierto que ya las tengo publicadas en obras de mi autoría, pero para colgarlas en el hilo, tengo que resumirlas y estructurarlas de un modo distinto a como están en los libros; no es el mismo formato.
A ver, alguna ya la ha comentado @elescritorfantasma:
Alguna otra, @Cosnava, en esta otra entrevista o en algún sitio del foro ―si no recuerdo mal―, decía que hay que saber en qué momento está cada uno, y estoy totalmente de acuerdo. Al principio, sobre todo, no importa tanto el dinero que ganes, sino los lectores que consigas, por eso no hay que menospreciar la cantidad de ellos que nos puede traer poner obras de calidad gratuitas con carácter permanente. Lo primero es que nos lean; el dinero viene después (a este respecto, algo comentaba en el mismo sentido @Fernando_Trujillo que, como sabéis, las primeras partes de sus sagas no tienen coste económico alguno):
Y, en el foro, leyendo en profundidad lo que más autores han expuesto en él o en entrevistas como la anterior, hay ya una gran información de utilidad. Aunque sí es verdad que, también, muy dispersa en diferentes hilos o fuentes y, quizá, concentrarla en un solo sitio, sería conveniente. Intentaré hacerlo pronto, pero me va a llevar tiempo. Ya sabéis que, lo de escribir, es lento. Y ya veis que, para dos cosillas que he puesto, el tochón que ha salido. Os vais a echar horas leyendo, me temo, ja, ja, ja.
Muy de acuerdo con esto. Yo no he llegado a ponerlos de forma gratuita, pero sí que estaban algo más baratos al principio (hasta el punto de que en la versión en papel ganaba menos de un euro). Con el primer libro no recuperé la inversión (maquetación, portada, corrección), pero aun así me lancé a publicar el segundo. En el momento del lanzamiento estaba en 900 euros de pérdidas. Ahora, unos meses después, ya he recuperado ambas inversiones, así que todo lo que venga será en positivo. Es más, la próxima publicación del tercero estará pagada de antemano.
Si la tendencia es similar en cuanto a lo que aumentan los lectores al ampliar una serie de libros, espero muy buenos resultados de esa tercera publicación.
Mi experiencia en intentar vender en frío también es similar y, hablando de lo que mencionaba @serenaender en otro hilo sobre cómo conseguir suscriptores, a mi lo que mejor me ha funcionado es la «galletita». Tienes que darles algo por lo que les merezca la pena «regalarte» su correo electrónico. En Newsletter Ninja menciona las siguientes posibilidades:
- una precuela.
- un epílogo o epílogo extendido.
- una historia «lateral»: algo que pasa a la vez que la historia del libro pero que no se ve en el libro. Le puede pasar a un personaje secundario o algo parecido.
- directamente, el primer libro de una saga, o el primer relato de una serie. Yo a esto me resisto; mis libros tienen más de 100.000 palabras y mucho esfuerzo; me niego a regalarlos. Pero hay gente que lo hace y le funciona.
- puedes usar algo que no esté relacionado directamente con la historia, pero que esté en el mismo género/estilo.
Yo llevo un tiempo usando una mini precuela de unas catorce páginas que funciona muy bien. Es sobre la vida del protagonista años antes de que empiece la primera novela de la serie. Y, quién sabe, quizás algún día me atreva a continuar la historia y convertirla en un libro de propio derecho.
Mark Dawson tiene una cookie muy particular. Es un informe psicológico de su protagonista, un espía que trabaja para el gobierno británico.
Puedes intentar hablar de la ciudad/sitio donde se desarrolla la historia, de la profesión del protagonista,… Seguro que hay alguien por aquí que use alguna otra cosa y le vaya muy bien.
Estas cookies, además de ponerlas en tu web y en tus redes (la puedes fijar en FB y Twitter o ponerlas en la bio), las puedes usar para los anuncios de FB como decía @elescritorfantasma. Yo las he probado una vez y dan muy buen resultado. Cuando tenga un hueco lo volveré a hacer.
Aporto mi granito de arena, que no es otro que la práctica, porque que todo lo demás está ya dicho. Curiosamente, en enero escribí esto, a raíz de la misma pregunta que me llegaba por email:
Por supuesto, no es una ciencia exacta, pero ahorrará tiempo a quien experimente. Espero que os sea útil.
¡Un abrazo!
Así es. Puede ser de una manera u otra, pero algo hay que ofrecer. Es esencial comprender esto, no solo en edición por cuenta propia, sino que también es una práctica usada por los grandes grupos y autores de renombre. Volviendo a lo que comentaba de títulos gratuitos, si se echa un vistazo en Amazon, hay varios ejemplos:
Sobre esto, hay un hilo en la comunidad, por lo que sería redundante ahondar en ello:
Desde luego, no es la única forma, como comenta también el @elescritorfantasma. Hay muchas herramientas y cada cual ha de usar aquellas que mejor se ajusten a su condición particular.
En cualquier caso, ¡genial que vayamos comentando entre todos! Estamos constantemente aprendiendo y, entre unos y otros, es más fácil poder abarcar las diferentes vertientes. Yo espero en breve aportar mi parte.
Qué bueno. No conocía los de Posteguillo y Reverte; les echaré un vistazo.
Sabía que te iban a gustar (o, al menos, llamarte la atención), ja, ja, ja. Ya nos vamos conociendo un poquillo en lo personal.
Como autor, considero fundamental tener un mecanismo para que cada lector ganado (con las técnicas mencionadas arriba o cualquier otra) luego se quede conmigo. Ese mecanismo, en mi caso, se llama lista de correo.
Cualquier persona que sepa un poquito de marketing digital te repetirá hasta la saciedad que una lista de correo es la herramienta más poderosa para vender un producto. Ninguna red social convierte como convierte un email (convertir = hacer una venta). Además, si tienes una lista, el canal de comunicación con tus lectores es tuyo. Si tienes seguidores en las redes, el canal de comunicación con tus lectores es de la red y puede cambiar las reglas cuando quiera. Lo veo como plantar árboles frutales en tierra alquilada.
PD: Para los autores que ya tengan una lista:
Muchas gracias por las aportaciones y ya os digo que voy cogiendo sitio para el resto de mensajes.
Una de mis grandes dudas en todo esto es que yo ya tengo una página en la que publico relatos semanalmente. Anda muy justa en visitas —apenas diez diarias—, pero no consigue suscriptores. Así como en las redes sociales asociadas, el número de seguidores va creciendo, no hay manera de que la lista de correo se incremente. No me refiero a uno o dos, sino a ninguno. Tuve unos pocos al principio y se acabó.
Quizás lo que me falte vaya en la línea de lo que comentáis, dar un aliciente a la suscripción, con contenidos exclusivos.
He de reconocer que no tengo mucha confianza en estas iniciativas, porque al final, tampoco tengo demasiadas visitas en la página. Pero le daré una vuelta.
Aparte de que, tarde o temprano, acaban por limitar el alcance. Creo recordar que, en Facebook, está al 10% o algo así, es decir, necesitas mil seguidores para que les llegue lo que publicas a cien. De ahí que se tenga que acabar invirtiendo en publicidad para mejorar resultados, como comentaba @elescritorfantasma con anterioridad.
Me parece que era @Cristian, entre otros, quien recomendaba MailerLite para las suscripciones por correo:
En mi caso, cuando empecé en 2005, solo existía FeedBurner, pero llegué a idénticas conclusiones y lo implementé al momento. Pese a que puede ser arcaico, sigo con él por dos razones: una, porque en la actualidad priorizo más escribir que andar al día en tecnología; y otra, porque prefiero que mi relación con los lectores sea más literaria que personal (FeedBurner no permite interacción, solo envía las notificaciones sin opción a respuesta). Pero, de igual modo que, cuando yo me inicié en esto, usé las mejores herramientas del momento para lograr una base de lectores, quien lo haga ahora debe hacer lo propio con las del presente.
Dicho esto, voy al lío. Había pensado poner referencias de más autores que ya han comentado cuestiones similares a las que voy a detallar a continuación, porque en el propio foro o por otras fuentes ya se han dicho muchas de ellas, si no todas. Aunque por cuestión de tiempo, y no quiero que se me olvide e incumplir la palabra dada, iré al grano en lo que a edición por cuenta propia se refiere, dado que es el perfil mayoritorio de esta comunidad. Antes, sin embargo, creo necesario puntualizar que publicar por cuenta ajena no se debe descartar: el abanico promocional es mucho más amplio, aparte de que hoy día sigue siendo una industria muy potente. Tanto es así que casi el 45% del PIB de la UE procede de la propiedad intelectual. No es ninguna tontería.
Puede que las cosas cambien con el tiempo, o no. Pero, por ahora, publicar en papel con una editorial, a ser posible sin ceder los derechos digitales y solo para territorios en los que se vaya a distribuir, sigue siendo una muy buena opción, en especial en el mundo hispano, al que no se accede de manera eficaz en este soporte por otros medios más allá de España, Estados Unidos y México.
Aclarada esta puntualización, aparte de lo comentado a lo largo del hilo y las promociones de Ebrolis, que pongo en primer lugar por su excelente resultado-coste (razón por la que pienso nos hemos llegado a juntar aquí, al menos al principio), ¿qué otras herramientas hay y por qué es difícil conseguir una base de lectores?
La cuestión es que, ya solo a nivel estatal ―poniendo como ejemplo a España―, cada semana se lanzan al mercado más de 1500 obras por cuenta ajena, casi 7000 al mes, unas 80 000 al año. En tal escenario ―al que habría que sumar las internacionales y autoeditadas―, la mayoría quedarán sepultadas bajo la continua avalancha de novedades, pasarán desapercibidas a menos que se consiga destacar de manera notable.
En la era analógica, con los medios de comunicación como fuentes de información primordiales, lograrlo era más sencillo, también más restrictivo e inaccesible. En la digital, en cambio, más abierta y plural, supone una complejidad mayor al haberse multiplicado los canales de transmisión.
De ahí la importancia de planificar la promoción, muy en especial entre noveles y, más aún, si no existe intención de desarrollar una carrera literaria. Un nuevo lanzamiento de un escritor con trayectoria es noticia, con lo que puede permitirse realizar una labor propagandística más distendida y centrarse en mayor medida en la creación; pero no ocurre lo mismo con quienes todavía son desconocidos.
En el primer caso, los lectores que siguen al autor, serán quienes le auparán en las clasificaciones de más vendidos y le darán publicidad, logrando de este modo acrecentar su base actual y futura; en el segundo, solo se podrá contar en un inicio con los más allegados, con probabilidad no tanto por el libro en sí, sino por vínculos personales y, mediante ventas por compromiso, difícilmente se conseguirá obtener difusión suficiente, con lo que el resultado habitual acostumbrará ser vender entre veinte y doscientos ejemplares.
Por tanto, para aumentar estas cifras, es crucial primero identificar con precisión milimétrica cuál es el público ideal, los lectores objetivo, y dirigir todos los esfuerzos en alcanzarlos: son ellos quienes tendrán un interés genuino en leerlo y recomendarlo. Y se ha de proceder con mayor ímpetu cuantos menos se vayan a escribir, el máximo si es uno solo, pues no habrá una segunda oportunidad.
No obstante, si bien las cifras de novedades literarias pueden parecer abrumadoras, no lo son tanto, ya que la gran mayoría contarán con una estrategia promocional débil o inexistente y, de esta forma, rara vez se logra captar la atención de los lectores. Por consiguiente, es mucho mayor la competencia aparente que la real, siempre y cuando se comprendan y apliquen mecanismos que fomentan la visibilidad.
Algunos de ellos deben iniciarse ya con bastante antelación al lanzamiento, siendo el primero identificar con precisión al lector ideal y también al comprador del libro. Pueden coincidir o no ―por ejemplo, en infantil, serán los propios niños quienes lo adquieran o sus padres, dependiendo de la edad―. Es crucial determinarlo porque, a partir de ahí, se podrá establecer el modo más eficaz para llegar hasta ellos.
A continuación, debe iniciarse una investigación complementaria acerca de qué sitios web, redes sociales, plataformas especializadas, lugares y medios de comunicación serían los más influyentes para ese público en específico; y averiguar si tendría algún coste ―y de ser el caso, cuantía― además de requisitos necesarios para asegurarse la mejor cobertura tras el lanzamiento.
Requerirá tiempo, por supuesto, aunque toda la información precisa para esta cuestión en concreto puede encontrarse a través de internet ―existen directorios, como ejemplo, el creado por @acapparelli: resenansancho.com― o, en su defecto, contactando con quienes interese una colaboración. Hecho esto, se estará ya en condiciones de establecer la estrategia a desarrollar.
En fin, hay que conocer muy bien el medio en el que uno va a moverse antes de dar un paso. Esto vale para cualquier ámbito, no solo el literario; de igual forma que sería temerario comenzar a invertir en bolsa sin saber cómo funciona, lo mismo sucede aquí. Hay que formarse, investigar, y sobre todo, actuar. Si todo queda en una información teórica, sin llegar a la acción, no sirve de nada más que para andar dando vueltas como un pollo mareado.
Ya os avisé que iba a ser un tochón, y quizá os quedéis decepcionados al no deciros cómo vender miles de ejemplares un segundo justo después de que hayáis leído esto; pero me temo que algo así no existe. Conseguir una base de lectores suele ser fruto de mucho trabajo previo y tiempo invertido en la mayoría de los casos, salvo que influyan cuestiones extraliterarias. Fijaos en los autores que tenéis de referencia: ¿cuántas obras llevan escritas ya? Como en todo, hay excepciones, pero es muy raro el caso de un éxito espectacular con una sola obra.
Por tanto, hagáis lo que hagáis, escribid. Luego, averiguad dónde está vuestro público, qué sitios usan para informarse de las novedades y comprar, y procurad estar presentes; y, por último, ofrecedles algo de interés para que se suscriban a vuestros canales. En realidad, este sería el resúmen, en mi opinión, claro. Como siempre digo, no hay una regla que sirva para todos por igual. Si no os funciona, probad otras hasta que deis con la vuestra.
Gran respuesta!
En cuanto a esto:
Negativo. Usé Mailchimp mucho tiempo, pero ahora uso y recomiendo Mailerlite. Es mucho más barato y tiene menos “cosas que no tienen que ver con email márketing”. Mailchimp pasó de ser una herramienta de email muy buena a convertirse en un servicio rarísimo (y caro).
Releyendo lo que he escrito, pienso que quizá quede demasiado abstracto y exponerlo con hechos puede dar una visión más clara:
En mi caso particular, me inicié como autor por cuenta ajena, y ya durante esa etapa, la mayor parte de los lectores que visitaban mi web y se suscribían, procedían de Latinoamérica. Estaba muy bien posicionado en buscadores, así que eran miles. Debía llegar a ellos, y en parte así fue, aunque no con la potencia que quería, dado que por aquella entonces las editoriales eran muy reticentes a sacar libros electrónicos ―aún hoy algunas lo son por temor a la piratería― y la distribución en papel centralizada desde España no era muy eficiente. Pero, por aquella entonces, no tenía fuerza suficiente como para negociar contratos por regiones. Como dice @Cosnava, hay que saber en qué momento está cada uno…
Pasaron doce años hasta que, en 2017, pensé que publicar por cuenta propia en Amazon podía ser la solución. Pero tras profundizar en esto, me di cuenta en 2019 que estaba igual que al principio: mi público objetivo latino no compra por ahí apenas; y seguía teniendo los mismos o mayores problemas con la distribución física. El mercado principal de Amazon, quitando España, México y Estados Unidos, es anglosajón.
Bien, pues tocaba solucionar el problema. Probé en otras tiendas y, entonces sí, di con mi público en digital, sobre todo en Google Play. Con eso solucionado, ahora solo me queda una cosilla más por hacer, y en ello estoy: distribución física en el continente americano con unos mínimos necesarios, y para eso me hace falta contar con editoriales autóctonas. Una vez consiga eso, ya estaré satisfecho, además de haber cumplido con la promesa que hice hace tiempo, de que llegaría hasta allí en condiciones.
Como veréis, ha sido todo un periplo, pero tampoco en valde; el reconocimiento y respaldo institucional acumulado durante esta etapa, no los tenía hace años, y confío en que eso facilite mucho las cosas. Aunque la edición por cuenta ajena, es lenta, muy lenta, y hay que tener mucha paciencia…
En fin, con esto quiero decir que, aunque para mí fue todo muy despacio, en gran medida porque no existía información apenas acerca de la edición y no contaba con nadie que me pudiera asesorar, hoy día, es muy diferente, valga de ejemplo este foro. Podéis ir mucho más rápido, pero en el fondo, pienso que el proceso es el mismo: toda acción debe ir enfocada al encuentro de los lectores, sea cual sea el medio más propicio para conseguirlo. A eso me refería con todo el tochón anterior de este hilo.
También debo confesar que me da un poco de reparo contar mi historia pero, las conclusiones que he sacado, están basadas en mi experiencia. Es con ese ánimo con el que lo cuento, para que se entienda mejor lo que quiero decir con «buscar y encontrar el público objetivo». Solo espero que no tardéis tanto como yo en hallar la forma, de ahí mis recomendaciones.
Para el debate sobre el gestor de correos a usar, este artículo lo explica muy bien: https://www.emailtooltester.com/es/blog/alternativas-a-mailchimp/
Estoy con @Cristian. Mailchimp es muy bueno y tienes más funciones que Mailer Lite. Yo era reacio a cambiar, por pereza y porque me había habituado a su sistema. Hicieron cambios y continué. El motivo del cambio no fue el precio, sino que un día me vi perdido en una plataforma que conocía como la palma de mi mano. Las razones son: MC pasó de ser un sistema de mail marketing simple para incluir servicios como campañas de FB Ads y otras funciones que, a nosotros, no nos sirven de mucho. Ahora está más enfocado al e-commerce con tiendas tipo Shopify. Por supuesto, subieron los precios y tenían otro problema: los suscriptores que se borraban de la lista, seguían contando a la hora de cobrarte.
Finalmente me pasé a Mailer Lite y eso que estudié muchas opciones. Es un poco más limitado que MC en algunos aspectos, pero muy bueno y ofrece lo que necesito como escritor: listas de correo, automatización y landing pages profesionales y eficaces. Para gustos, los colores. Hay opciones gratuitas que os pueden servir, como SendFox, pero merece la pena pagar por un servicio que funcione, si tenéis en mente aumentar vuestra lista de lectores.
¡Un abrazo!
No pude pasar desapercibido tu mensaje, porque hoy recién termino de ajustar detalles en mi portal de marca personal y justamente utilicé MailChimp. Debo admitir que me costó bastante usarlo, pero me interesa todavía porque aparte de vender Ebooks -es una propuesta que estoy tanteando-, me interesa ofrecer mis servicios como redactor y/o copy… Sin embargo, me llama la atención ese Mailer Lite, ¿cómo es, me podrías dar más detalles? Es que no me quiero desinstalar el Plugin que recién termino de configurar porque me ha tomado un buen rato.
Jaja, no te preocupes, no tiene nada que no tenga Mailchimp. Es decir, con MC también puedes crear landing pages o automatización de correos. Mailer Lite, en cambio, no ofrece otras herramientas que MC sí, pero que no son necesarias para mí (como las audiencias o los anuncios de Facebook Ads, ya que las controlo a través de la propia plataforma). Para más información sobre Mailer Lite, puedes mirar aquí: https://www.mailerlite.com/features.
¡Un abrazo!
¡Vale, vale, gracias! Hombre, me asusté… Igualmente le daré un vistazo a esa platafoma, ¡Muchas gracias!
¡Un abrazo!
Hola. Un placer saludar. Soy nuevo por aquí y me pierdo un poco, pero quisiera comentar una estrategia que a mí, más o menos me funciona. Je, je.
Yo escribo principalmente fantasía y, como también soy diseñador de videojuegos, lo que hago es tratar a mis libros como si fueran videojuegos. ¿A qué me refiero?
Pues tengo una página web donde voy colgando lore, ilustraciones, etc. Todo ello para enriquecer el mundo y mantener a mis fans con novedades mientras llega el siguiente proyecto.
De hecho, hace poco hice un verkami con bastante éxito en el que lancé una edición coleccionista especial 10 aniversario de la primera novela. Incluía tapa dura con imitación a cuero, libro de arte, 2 capítulos adicionales, escenas extendidas, láminas dibujadas a mano, set de miniaturas para usar en el juego de mesa que estoy preparando y una figura especial edición coleccionista.
Había un pack incluso que incluía un licor que beben en ese universo.
Vamos, como un “director’s cut” XD.
Un saludo, compis.